¿Por qué bailamos?

Hoy quería recordaros qué estamos todos en el mundo del Baile de Salón, cada uno por sus propias razones, pero creo que es importante recordar de vez en cuando que no estamos solos y que no pasa nada si la gran mayoría de la gente de alrededor, no nos entiende.

Mucha gente cree que estamos locos, que somos de una secta y nunca entenderán por qué somos capaces de sacrificar tantas cosas por el baile. Y esto es válido para todo tipo de personas, edades y modalidades. Bailar es… ¡una forma de vida!

Al margen de los beneficios obvios a nivel físico, manteniendo nuestro cuerpo en forma, los beneficios sociales de estar en contacto con gente, los beneficios en nuestra salud por el acondicionamiento general de nuestros órganos…

Al margen de los beneficios en las relaciones con nuestra pareja por el hecho de pasar más tiempo juntos, al margen de la mejora de la autoestima, el baile es una forma de vida.

Por esto considero obligatorio ir a bailar como mínimo una vez a la semana y quienes hacéis baile deportivo, entrenar unos cuantos días. Considero que es más importante bailar que ir al cine. El baile nos aporta sobre todo, beneficios a nivel mental, nos ayuda a expresarnos y también a desconectar de los problemas creando nuestra propia realidad tal y como queremos.

La gente dice que estamos locos, pero es curioso ver cuantas vidas han cambiado gracias al baile. Sin lugar a dudas, la gente que baila tiene mejor apariencia que sus compañeros de la misma edad, es más positiva y se mantiene más joven de espíritu. En mi trayectoria como profesor, he visto como han crecido muchos alumnos, de niños a adultos y puedo afirmar que gracias al baile son personas de más éxito. Cada uno en una medida, pero en general todos aprenden a ser disciplinados, competitivos a la vez, saben trabajar en equipo y sortear problemas.

Pero esto no pasa sólo con los niños. He visto cambiar a la gente, gracias al baile, como de la noche al día. ¡Hasta las caras, los cuerpos, la forma de pensar y también el carácter! En mi carrera hay ejemplos muy extremos. Gente que diez años después, aparenta veinte años más joven. Personas que ha encontrado un camino para seguir. Muchos han encontrado su forma de vida y de trabajo. Esta es la magia del Baile de Salón.

Siempre he defendido que el Baile de Salón es multifacético. Es la mezcla perfecta de deporte, arte y danza. Incorpora lo mejor de cada disciplina igual que intenta incorporar continuamente nuevos estilos de baile y nuevas formas de expresión. Es bonito de ver y es bonito bailar. Es mecánica ósea y es musicalidad.

El Baile de Salón es bueno en cualquiera de sus formas, aunque yo siempre recomiendo a las personas que quieren una experiencia más completa que prueben el Baile Deportivo. A estas alturas espero que nadie piense ya que el Baile Deportivo es para una pequeña minoría de personas. Los ejemplos los tenemos en los grupos de edades que hay en una competición, desde los juveniles de menos de 11 años hasta los senior 3 y 4, que son mayores de 50 ó 55 años.

Todo el mundo lo puede probar. Yo prefiero el baile deportivo porque tiene más disciplina, mayor afán de superación pero sobre todo, nos hace más fuertes mentalmente. Competir en nuestra sociedad no es una opción, es una realidad. Si queremos conseguir algo tenemos que ir a por ello. El baile deportivo nos ayuda para avanzar en este camino.

Este pequeño artículo se haría muy largo si explicásemos con detalle cada uno de los beneficios del baile, pero aquí tienes una lista de los mas importantes: